En medio del ritmo vertiginoso de nuestra ciudad, existen vestigios de nuestra herencia prehispánica, las pirámides en CDMX que siguen desafiando el paso del tiempo.
Las pirámides siempre han sido un símbolo sagrado, quizá la principal diferencia con otras pirámides del mundo es que la función principal de las pirámides mexicanas no era funeraria, sino, adoratorio.
Es por eso que los arqueólogos suelen llamarlas «templos» en lugar de pirámides, y en este artículo vas a conocer las pirámides CDMX que quizá no conocías.
1. Pirámide del Cerro de la Estrella
Ubicada en la Alcaldía Iztapalapa al oriente de la CDMX, esta pirámide se construyó en lo alto del Cerro de la Estrella.
Nombrado así por la Hacienda de la Estrella, que se encontraba en sus faldas, en tiempos de la colonia.
Sin embargo, su nombre prehispánico es Huizachtepetl que significa «cerro de huizaches», y es donde desde hace más de 150 años se realiza la representación de la Pasión de Cristo en Semana Santa.
De acuerdo al INAH, la relevancia de este lugar fue la ceremonia del Fuego Nuevo, realizado cada 52 años por los mexicas como una renovación del Sol y comienzo de un nuevo ciclo.
Puedes visitarla de martes a domingo de 9am a 5pm y la entrada es gratuita.
2. Pirámide del Cerro Mazatéptl
Esta es una de las pirámides en CDMX, en la Alcaldía Magdalena Contreras, en la cima del conocido Cerro del Judío o Cerro de las Cruces.
Se dice que el nombre de Cerro del Judío se debe a las huellas de pisadas humanas en una de las rocas de la cima del cerro, que supuestamente la gente relaciona con la leyenda del Judío Errante.
Sin embargo, el nombre original es Mazatépetl que quiere decir Cerro de los Venados, en el que se encuentra este templo dedicado a Ehécatl dios del viento.
Destaca la representación del animal místico de la tortuga con garras de jaguar, labrado en piedra a un costado de la escalinata de la pirámide, relacionado con la veneración a la fertilidad.
Puedes visitar el Parque Ecológico Mazatepetl de martes a domingo de 7:30am a 1:30pm, en donde además hay un museo de sitio, un invernadero y un mirador que vale mucho la pena. La entrada es gratuita.
3. Ruinas de Mixcoac: de las pirámides en CDMX más desconocidas
Se encuentra en la Alcaldía Benito Juárez al poniente de nuestra BonitaCDMX, a un costado del Periférico en la colonia San Pedro de los Pinos.
El nombre deriva del náhuatl Mixcoatl que quiere decir «serpiente de las nubes», haciendo alusión a la vía láctea.
Esta deidad estaba relacionada con las estrellas y también con la caza, por lo que se cree que el templo a Mixcoatl era visitado por los cazadores de Tenochtitlán y Tlatelolco, antes de sus hazañas.
Durante la época colonial, fue destruida gran parte de la pirámide de Mixcoac, incluso parte de ella quedó sepultada bajo el periférico.
Afortunadamente, quedaron algunos de los cimientos visibles y esta ZA cuenta con un centro cultural y un pequeño museo de sitio. Abre de martes a domingo y la entrada es gratuita.
4. Pirámide de Tequipa o Tecpan.
Esta pirámide puede ser de las más escondidas de nuestra ciudad, se encuentra en Santo Tomás Ajusco, uno de los 11 pueblos originarios de Tlalpan.
¿Qué pirámides están en la Ciudad de México? Esta es una de las joyas ocultas que muchos desconocen
Este basamento prehispánico fue erigido por los tecpanecas que huyeron de los mexicas hacia 1428 aproximadamente.
Destaca un tepetlacalli conocido como «El Cuartillo» que es una especie de cofre ceremonial prehispánico que se encontraba en lo alto de la pirámide de Tequipa.
Esta valiosa pieza se encuentra en el atrio de la iglesia del pueblo de Santo Tomás Ajusco, recodando la herencia prehispánica de la región.
5. La Casa del viento o Templo Ehécatl: La ZA más pequeña de México
¿Alguna vez has notado la peculiar icnografía del metro Pino Suárez? Representa un adoratorio en honor al dios Ehécatl, el dios del viento.
Cuenta con tan solo 88 metros cuadrados y se descubrió en 1967 durante la construcción de la línea 2 del metro.
A pesar de que no está oficialmente catalogada como Zona Arqueológica, se sabe que este basamento formó parte un gran centro ceremonial que corría de la Calzada Iztapalapa hasta Tenochtitlán.
A pesar de su pequeño tamaño, su significado histórico es inmenso, mostrando la coexistencia de lo antiguo y lo moderno en la ciudad.
6. Pirámide de Cuicuilco: una de las pirámides en CDMX más antiguas.
La pirámide de Cuicuilco está en el sur de la Cuenca de México en la Alcaldía Tlalpan, justo en el cruce del Periférico e Insurgentes Sur.
Considerada una de las más antiguas de la región, Cuicuilco destaca por su diseño circular y por ser contemporáneos con los olmecas, la cultura más antigua de Mesoamérica.
De acuerdo a las investigaciones de la arqueóloga Zelia Nuttall, Cuicuilco significa «Lugar donde se hacen cantos y danzas».
Se estima que su construcción data del los años 600 a 800 d.c. siendo uno de los centros ceremoniales más importantes del Valle de México.
Puedes visitar la Zona Arqueológica de Cuicuilo y su museo de sitio, donde hay expuestas piezas encontradas en su excavación, de martes a domingo y la entrada es libre.
7. Templo Mayor: el corazón de la CDMX
El Templo Mayor ubicado el corazón del Centro Histórico, en la Alcaldía Cuauhtémoc, a un costado de la Catedral Metropolitana y frente al Zócalo.
Definitivamente, es la ZA más importante para los chulangos, pues aquí se encuentran los vestigios del que fue el edificio más importante de la Gran Tenochtitlán.
Este templo se erigió al dios principal del pueblo mexica, Huitzilopochtli, así como también a Tláloc, dios de la lluvia. Destaca que en la cima de la pirámide había dos capillas, una para cada una de las deidades.
Se sabe que el Templo Mayor medía en su totalidad 45 metros de altura, y que está construido en capas, esto porque cada vez que querían agrandarlo, construían sobre la edificación anterior.
Puedes visitarlo de martes a domingo de 9am a 5pm y el costo es de $95 mxn incluyendo el Museo del Templo Mayor que vale mucho la pena. Y recuerda que los domingos, la entrada es libre.
8. Templo Mayor de Tlatelolco, la ciudad Gemela de Tenochtitlán
Seguidamente, está la Zona Arqueológica de Tlatelolco, ubicada en la colonia Nonoalco – Tlatelolco de la Alcaldía Cuautémoc.
Tlatelolco se fundó 13 años después de Tenochtitlán, por un grupo mexica que, inconformes, buscaron establecer su propia ciudad.
A pesar de que tras la conquista, esta zona sufrió varios saqueos, se conservan restos de varios de sus edificios, incluido su Templo Mayor, que se cree pudo ser más grande que el de Tenochtitlán.
Puedes visitarlo de lunes a domingo de 9am a 5pm y el costo de entrada es de $80 mxn.
9. Pirámide de Tenantongo: una de las pirámides en CDMX perdida dentro del Bosque de Tlalpan.
Así como hay pirámides que te resulten más conocidas, Tenantongo puede ser de las pirámides en CDMX más desconocidas.
Se ubica dentro del Bosque de Talpan, al sur de la ciudad, aproximadamente a 1.25 km de la Pirámide de Cuicuilco, por lo que se cree que forman parte del mismo centro ceremonial.
Gracias a las investigaciones se sabe que es de una pirámide también redonda, con aproximadamente 18 mts. de altura y entre 50 y 70 mts. de diámetro.
Puedes visitarla todos los días en los horarios del Bosque de Tlalpan, que abre de 5:30 am a 5pm. Entrada Libre.
10. Cuahuilama: el sitio arqueológico escondido en Xochimilco
Finalmente, te platico sobre el Sitio Arqueológico Cuahilama, ubicado en el pueblo de Santa Cruz Acalpixca en Xochimilco.
Se trata de un centro ceremonial ubicado en la cima del cerro Cuahilama, nombre que significa «cabeza de anciana».
De hecho, la zona expuesta es apenas la punta de lo que se cree, es un área mayor a 3 km de vestigios arqueológicos que se extiende por los pueblos de Santa Cruz Acalpixca, San Gregorio Atlapulco y San Bartolomé Xiucomulco.
Destacan sus petroglifos de diversos animales, como ocelotl (jaguar), papalotl (mariposa), entre varios más, relacionados con el calendario y cosmovisión xochimilca.
Este lugar está abierto al público las 24 hrs y el acceso es gratuito.
Como resultado, podemos ver que las pirámides en CDMX nos invitan a explorar y aprender sobre las civilizaciones que una vez habitaron nuestra ciudad.
Al visitarlas, no solo descubrimos el pasado, sino que también valoramos y conectamos con nuestras raíces y tradiciones.
¡Cuéntame si conocías todas estas pirámides chulangas!